La formación en cocina ha vivido un gran impulso gracias a programas televisivos que han sacado la cocina del ámbito doméstico poniendo a la vez de relieve que, además de habilidades, la cocina necesita formación.
Si te apasiona la cocina pero no estás seguro de que esta sea tu vida. Si crees que lo de cocina creativa es sólo propio de recetas Top Chef o no estás seguro de estar aún a tiempo para dedicarte a ello, queremos que sepas que solo el 39% de los «grandes» supo siempre que quería ser cocinero.
En los últimos años, diferentes programas gastronómicos de televisión, han puesto en relieve la profesionalización de un sector que, si bien llevaba décadas haciéndolo, ha sido ahora cuando ha ganado más adeptos. Convertido casi en materia de culto, han crecido como la espuma academias y cursos de todo tipo para formarse como chef, entre los que continúan destacando afamados centros como el Basque Culinary Center o Le Cordon Bleu.
Formación y cursos de cocina
En aprendum, contamos también con cursos online de cocina con los que podrás aproximarte a este apasionante sector a través del conocimiento de una cocina fácil, recetas de cocina y postres o, incluso, cocina vegetariana, con los que esperamos des tus primeros pasos para convertirte en chef.
Aunque, además de formación, la cocina requiere de ciertas aptitudes. La que consideramos más importante es, sin duda, la humildad. Empieza por asumir que, por brillante que seas, difícilmente te convertirás en un chef famoso y lleva a tu cocina siempre como valor principal de tus platos la humildad.
Es el mejor consejo que podemos darte aunque tenemos más: Visualiza el sacrificio. Ten en mente desde el principio que, una vez que te adentres en el apasionante mundo de la cocina, tendrás que renunciar a gran parte de tu vida social. Los horarios y los períodos de descanso, difícilmente coincidirán con los de tus familiares y amigos, asumirlo desde el principio te hará ganar en felicidad además, esto no pesará nada cuando te encuentres ante un buen plato.
Responsabilidad. Si consigues estar entre los mejores y no tenemos dudas de ello, deberás liderar equipos. Además de cocinar, un buen chef sabe dirigir. Sé lo suficientemente comprometido y solidario como para gestionar una cocina, delegar tareas y asumir funciones de líder. Ello conlleva también evitar las excusas cuando las cosas no salen bien y, por supuesto, asumir responsabilidades.
Ponte a diario metas nuevas y trabaja para alcanzarlas. Nada te llegará sino sales de la zona de confort. Si esta zona aunque cómoda y sin riesgos es válida en algunos sectores, resulta impensable en esta profesión y puede conllevar la caída de tu restaurante. Tu formación culinaria ha de ser forzosamente una constante. Debes leer y comer con los mejores, mejorar tus capacitaciones y técnicas y enriquecer tu vocabulario.
Si sigues estos consejos y te armas de paciencia, estarás muy cerca de convertirte en chef. Coge tus chaquetilla, fórmate y a cocinas.